#España e #Italia, dos países mediterráneos muy parecidos y famosos por su #gastronomía, entre otras cosas.
LA GASTRONOMÍA ESPAÑOLA.
La gastronomía española es de estilo rural y costero, con diversidad de muchas culturas, paisajes y climas. Esta, ha sido influenciada a lo largo de su historia por los pueblos que conquistaron su territorio, esto hizo que fuera muy conocida en #Europa.
A finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX cobró una identidad nacional, fundamentada en los diferentes #platos y técnicas culinarias propias. A partir de ese instante la cocina española evolucionó hasta lo que en la actualidad conocemos como la nueva cocina española.
Actualmente, en la cocina española, conviven dos realidades:
La cocina clásica y popular, fundamentada en la tradición.
La cocina actual, que emplea las más novedosas e ingeniosas técnicas de cocina de autor.
La cocina clásica posee unas raíces religiosas muy profundas.
Las “tapas” conocidas internacionalmente, son algunas de las formas de comer típicas de la cultura gastronómica española.
Entre los ingredientes españoles a destacar está la gran variedad de #quesos y de #vinos, los #aceites de oliva, el #jamón ibérico,….
España es grande y vasta como lo es su tradición culinaria.
LA GASTRONOMÍA ITALIANA.
La cocina italiana es un tipo de gastronomía que contrasta las especialidades más conocidas de la dieta mediterránea con una sutil combinación de ingredientes y pastas que entrelazan los sabores típicos de cada región y su ubicación geográfica.
Ambas cocinas comparten similitudes y diferencias entre ellas, por ejemplo:
Los arroces
La #paella es uno de los platos más conocidos de la gastronomía española no obstante desde la perspectiva italiana existen platos de arroces similares como los #risottos.
Las cocas
Las cocas saladas, que curiosamente se parecen a las focaccias italianas.
Los Jamones
El jamón no es valorado igual por estas dos gastronomías. Los jamones de denominación de origen ibérico (España) y Parma (Italia) son dos de los manjares más preciados por los gourmets, pero la principal diferencia es que el jamón Parma se suele utilizar como único ingrediente o como acompañamiento (queso, melón), mientras que el jamón ibérico se consume en su pureza.
Los quesos
En Italia existen más de 20 diferentes tipos de quesos, como pueden ser los típicos de la pizza 4 formaggi que combina 4 de los mejores quesos como la Mozarella, el gorgonzola, el fontina y el parmesano, aunque en la gastronomía española se puedan encontrar quesos excelentes como el queso manchego, el queso curado y el queso zamorano.
Las croquetas
Los italianos tienen los “Arancini”, que son pequeñas bolas de pan rellenas de carne, guisantes, arroz o queso que se asemejan a las ricas croquetas de la gastronomía española. Es un plato muy querido porque se puede consumir en cualquier momento del día y se puede encontrar con facilidad en la mayoría de restaurantes.
Otra variante italiana es el “Supplì”, parecido a la croqueta. Históricamente se solían cocinar para aprovechar las sobras de otras comidas.
El Tiramisú y el Arroz con leche
Dos de los postres típicos en cada país. El sabor del tiramisú sobresale al arroz con leche, por ser cremoso, dulce y por las diferentes variaciones que existen. Por su parte, el arroz con leche tiene un origen más antiguo que el tiramisú y puede encontrarse con muchas variaciones a lo largo de Europa y Asia.
¡Curiosidad! El legado de la cocina italiana en Cataluña
La cocina catalana comparte muchas similitudes con la cocina italiana, ya que durante años y especialmente durante la invasión romana recibió influencias de su cocina. En la actualidad se pueden encontrar platos bastante parecidos como el caso de la fideuá. La fideuá es un plato muy conocido de fideos con marisco que comparte similitudes a los spaghetti frutti di mare, ya que ambos se componen principalmente de pasta.
En definitiva, la gastronomía española e italiana son sabrosas, saludables, tradicionales, creativas, variadas, se pueden disfrutar en restaurantes populares y en elaboraciones de alta cocina.